La historia del lobo gris es una de las más conocidas de la fauna americana. Tiempo atrás, el lobo gris se encontraba grandemente esparcido por todo el territorio de Norteamérica, pero la caza despiadada terminó por mermar parte de su población.
Hoy en día, esta especie de cánido ha comenzado a mostrar signos de recuperación gracias a una exitosa labor de conservación. Muchas investigaciones han demostrado la importancia de estos animales en el bienestar y el funcionamiento adecuado de los ecosistemas.
Los lobos grises son cánidos con colas abultadas, largas y a menudo con una ligera coloración negra en la punta. El color de su pelaje es básicamente una mezcla de gris y marrón con marcas faciales muy peculiares que pueden variar su color desde el blanco sólido hasta algunas combinaciones de negro. Los lobos grises lucen de alguna manera como un gran perro pastor alemán.
Tamaño: Estos lobos varían su tamaño en dependencia del lugar donde viven. Los ejemplares del norte son usualmente más grandes que sus parientes en el sur. El tamaño medio del cuerpo de un lobo gris varía entre tres y cinco pies de largo. Sus colas son generalmente de unos dos pies de largo. Con respecto al peso, las hembras pueden medir de 27 a 45 kg (60 a 100 libras), mientras que los machos pesan entre 31 y 65 kg (70 y 145 libras).
Dieta: Los lobos grises son carnívoros y por lo tanto su dieta se compone de grandes mamíferos ungulados como los ciervos, alces y bisontes. Además, también pueden alimentarse de algunos mamíferos como castores, roedores y liebres. Habitualmente un ejemplar adulto de lobo gris suele consumir unos 9 kg (20 libras) de carne en cada comida.
Longevidad: En estado salvaje, pueden vivir entre 8 y 13 años, incluso más. En cautividad, su expectativa de vida puede alcanzar los quince años de duración.
Los lobos grises pueden prosperar en una gran diversidad de hábitats, desde bosques tupidos y forestas hasta pastizales y desiertos. Actualmente, los lobos tienen presencia en regiones como Alaska, el norte de Michigan, el norte de Wisconsin, el oeste de Montana, el norte de Idaho, al noroeste de Oregón y la zona de Yellowstone en Wyoming.
Los lobos mexicanos, una subespecie del lobo gris, fueron reintroducidos en un parque protegido al este de Arizona y el suroeste de Nuevo México. El área de distribución histórica para el lobo gris cubría más de dos tercios del territorio estadounidense.
Estos animales logran comunicarse a través de su lenguaje corporal, el marcaje de su aroma, ladridos, gruñidos y aullidos. Gran parte de su comunicación se centra en reforzar su jerarquía social dentro de la manada.
- Cuando un lobo quiere mostrar síntomas de obediencia a otro lobo, este tiende a agacharse, gemir, esconder su cola y hasta lamer la boca del dominante.
- En el caso que quiera desafiar a otro lobo, podrá gruñir o plegar sus orejas hacia atrás.
- Para jugar, normalmente ejecuta movimientos de danza y brincos arqueados.
- También pueden ladrar como advertencia de un peligro.
- Los aullidos se utilizan para la comunicación a larga distancia, cuando se quiere reunir a la manada o mantener alejados a los extraños.
Los lobos grises son animales gregarios que viven en manada. La mayoría de estas manadas contienen por lo general entre cuatro y nueve miembros, pero el tamaño puede variar desde tan solo dos lobos a tantos como quince ejemplares. De vez en cuando, una manada puede aumentar hasta 30 miembros, hasta que algunos individuos parten a buscar nuevos territorios y formar un nuevo grupo.
Dentro de la estructura social de la manada existen jerarquías masculinas y femeninas. El macho alfa es el dominante de todo el grupo, tanto en las hembras como los machos. Los miembros alfa femenino y masculino son los únicos que se reproducen.
Las manadas cazan a menudo dentro de su propio territorio. Estos pueden variar desde 80 km2 (50 millas cuadradas) hasta más de 1500 (1000 millas), donde los miembros viajarán tan lejos como deban en busca de alimentos. Generalmente, suelen desplazarse a cinco millas por hora, pero pueden alcanzar velocidades de 45 km/hora (27 millas por hora).
Cuando los jóvenes adultos alcanzan los tres años de edad deben decidir si permanecer en la manada o marchar a buscar su propio territorio. El nuevo lugar establecido puede encontrarse cerca si existen abundantes presas. En otras ocasiones, los adultos jóvenes viajarán cientos de millas hasta encontrar un territorio adecuado.
Una característica peculiar de los lobos es que se aparean de por vida. En el norte de los Estados Unidos, esta especie se reproduce desde finales de Enero hasta el mes de Marzo. Para los ejemplares del sur, la temporada de reproducción puede comenzar un poco más temprano. El período de gestación tomará 63 días, dando a luz generalmente a una camada de cuatro a seis cachorros.
Estos cachorros son concebidos dentro de una guarida. Al nacer, no podrán ver ni oír, y su peso no excederá de una libra. Al cabo de las seis semanas, los nuevos integrantes de la manada serán destetados. Durante ese tiempo, los adultos tragan la carne para llevarla a sus crías. Tras regurgitar la comida, la depositan cerca de los cachorros para alimentarlos.
- Se consideran los miembros más grandes de la familia de los cánidos.
- Su aullido tan característico es utilizado para comunicarse. Un lobo solitario aúlla para atraer la atención de su manada, mientras que los aullidos en grupo son empleados para comunicarse con otras manadas rivales. Algunos de estos sonidos pueden ser contestados por otros lobos e incluso perros domésticos.
- Los lobos grises son animales excesivamente territoriales, y generalmente establecen territorios más grandes de lo necesario en aras de asegurar un mayor número de alimentos.
- Estos animales gustan de cazar en grupo. Un lobo solitario es capaz de capturar y matar a un ciervo, pero cuando cazan en manada sus presas pueden ser más grandes, como renos y alces. Además, los lobos grises pueden alimentarse de mamíferos, aves, peces, lagartos, serpientes y frutas.
- Cuando capturan a su presa, los lobos ingieren el alimento en grandes cantidades. Un solo ejemplar puede ingerir hasta nueve kilogramos de comida. El miembro de mayor rango en la manada es el primero en alimentarse, dejando las sobras para el resto de los miembros. Tres días después, volverán a salir en busca de nuevas presas.
- Los lobos grises no son grandes corredores, su velocidad máxima es de unos 45 kilómetros por hora. Sin embargo, su gran sentido del olfato y audición le permite detectar su presa con facilidad. Además, poseen una tenacidad asombrosa, y se sabe que pueden perseguir a su objetivo durante todo un día si fuera necesario.
- En el seno de la manada, estos animales desarrollan vínculos sociales muy sólidos. A menudo demuestran su gran afecto por la familia, llegando a sacrificarse en aras de proteger a sus miembros.